Lamine Yamal (17 años) no deja de sorprender. El joven juega con una madurez impropia de su edad, ya no solo por la calidad que demuestra partido a partido, sino porque ante el Inter tuvo la personalidad suficiente para mantener vivo a un Barça que sufrió dos duros golpes antes del descanso.
Él creyó en la remontada y fue el encargado de motivar a la afición para impulsar al equipo de Hansi Flick en Montjuïc. Además, el joven ya lanzó un aviso para el partido de vuelta: "Creo que en la vuelta lo daremos todo y pasaremos", declaró tras el encuentro en los micrófonos de CBS Sports.
Frente al Inter, en su partido número 100 como culé, ofreció una actuación memorable, especialmente en la primera mitad. Una exhibición que hacía tiempo no se veía en Can Barça. Más allá de su gol y sus dos tiros al travesaño, Lamine atrajo toda la atención de la defensa 'neroazzurra', generando espacios que sus compañeros aprovecharon para superar el sólido bloque defensivo de Simone Inzaghi tras el tempranero gol de Thuram.
Lamine Yamal disputó su partido número 100 contra el Inter.
Lamine dominó el ataque culé. Fue el jugador con más remates (6), más centros intentados (10), más regates completados (6) y el tercer jugador de campo con más intervenciones (102), a pesar de ser extremo y tener menos facilidad para recibir balones que defensas o mediocampistas como Pedri y De Jong (107 y 112 intervenciones, respectivamente).
Además, Lamine realizó dos disparos a puerta, creó dos ocasiones, completó 46 de 61 pases (75% de efectividad), dos de ellos en el último tercio. Anotó el gol del empate, clave para reenganchar al Barça en el partido, y golpeó el larguero en dos ocasiones, rozando el segundo tanto.
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