Jules Koundé (26 años) es un excelente defensa. Es un portento físico por su potencia y resistencia, además de ser un jugador polivalente que, siendo central, se ha adaptado perfectamente a las labores de lateral, destacando incluso por sus pases de gol y sus llegadas al área rival. Sin embargo, tiene un defecto: a veces peca de impuntualidad. Y eso, para Hansi Flick, es un pecado casi mortal. El entrenador siempre termina perdonándolo, pero ya son tres veces (frente al Alavés, Espanyol y Rayo Vallecano) en que sus retrasos el día del partido le han costado la titularidad. Luego siempre entra en la segunda mitad y recupera su puesto en el siguiente partido, pero sigue siendo una mancha en su historial y un perjuicio para el Barça, ya que Flick es inflexible en ese aspecto.
Para evitar más retrasos, Koundé ha tomado una decisión: les ha pedido a algunos miembros del equipo de seguridad que lo acompañan en viajes y concentraciones que le avisen con 15 minutos de anticipación antes de la charla táctica previa al partido.
El francés intentó solucionarlo por su cuenta, pero al final concluyó que es mejor que alguien más le avise cuándo debe salir de la habitación del hotel para reunirse con sus compañeros y el técnico.
Por ahora, esta táctica está funcionando, y por el bien del Barça debe mantenerse, especialmente con los partidos decisivos en Copa, Liga y Champions. No se sabe cómo reaccionaría Flick si Koundé llegara tarde, por ejemplo, a la charla previa al partido contra el Inter de Milán, pero viendo su historial, mejor no tentar a la suerte. Por eso, Koundé optó por pedir ayuda externa.
Ziad es un experto en fútbol y analista deportivo, especializado en noticias, estadísticas y tácticas del juego. Es un entusiasta de la tecnología y la innovación, y le encanta compartir sus conocimientos con la comunidad. Le apasiona el fútbol y disfruta de la oportunidad de escribir sobre su deporte favorito.